7/21/2010

Inolvidable olvido necesario

Un charco sobre sus ojos derramado por un corazón de retazos confundido en el actuar de pensamientos fluctuantes. Los deseos insatisfechos trepaban por la entrepierna abrazando sus caderas y concluyendo con profunda certeza entre sus entrañas; buscaban lo que pocos saben descubrir y manejar, saciando poco a poco y con tal paciencia que ni el más veterano podría soportar el éxtasis del delirante instante.

Pero cuan poca dicha tendría si aquél momento inolvidable trajera amargura en lugar de innumerable placer. La desdicha embriagaría los retazos que poco a poco se desgastarían dejando fosas heladas desprendiendo un hedor enceguecido por los celos. La codicia podría más que la carne y ordenaría detener los latidos en los ojos y cesarían los deseos por no ser un momento inolvidable, al contrario, por ser ahora un olvido necesario.


F.

7/07/2010

Sutil detalle

En sueños borrosos nos encontramos el extraño y yo dejando claras cosas que con fantasmas obstinados no pudimos estar de acuerdo. Pero yo soy más obstinada que los fantasmas. Cada noche de insoportable insomnio y presión en el pecho, los deseo vueltos imágenes ahogan mi memoria y suplican un juego que haga la noche más afable y pasajera.


Más que una adicción o un simple capricho es una sensación que invade todo y no deja nada, como un ladrón de vida, como un vacío dulce al amanecer; porque el alba rompe el hechizo pero no las sensaciones, ella vuela entre recuerdos pero no aquellos que el cuerpo olvida, no con facilidad.


En sueños borrosos aparece el extraño luchando con el fantasma que muere en mi adicción mientras disfruto con él juegos peligrosos provocados por sus ojos y boca.


Eres el extraño de los sueños borrosos, el que parece un sueño pero es más real que el fantasma de mis pesadillas. Sutil detalle.


F.